¿La gente sigue huyendo de Guatemala?

La mayoría de los que migran a Estados Unidos desde América Central huyen de la violencia y el desempleo. Muchos vienen de Guatemala, donde las personas deportadas solo pueden intensificar esas condiciones. 

¿La gente sigue huyendo de Guatemala? Sí, lamentablemente es una situación que aún presiente. Lo irónico es que no solo huyen por falta de oportunidades, no solo ese es el problema. Otros problemas son la extorsión, falta de oportunidades y el nivel de delincuencia que está en un nivel alarmante.

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Testigos

Desde 2016, más de 90.000 guatemaltecos han sido deportados por vía aérea desde Estados Unidos. La mayoría huyó al norte para escapar de la pobreza y la violencia extrema.

Cuando el vicepresidente Mike Pence se reunió recientemente con los líderes centroamericanos en Guatemala, su mensaje fue alto y claro: detener el éxodo de migrantes. En la larga escucha de esta semana, la reportera María Martín analiza por qué es tan difícil.

Todos los días hay por lo menos tres aviones llenos de lo que se llama los vuelos de los deportados. Cada uno trae de vuelta a su patria entre 75 y 130 guatemaltecos aturdidos.

Cuando aterrizan, sin llevar nada más que una pequeña mochila, un empleado del gobierno les da a los retornados un sándwich y una botella de agua y una breve charla de ánimo.

Después de eso, están mayormente solos, enfrentando la misma situación desesperada que los llevó al norte en primer lugar. Juan Sebastián Tuil Mejía, de 44 años, fue deportado hace un año y todavía no encuentra trabajo.

¿La gente sigue huyendo de Guatemala?

 Juan Sebastián Tuil Mejía

“Incluso si, ya sabes, fuiste a la escuela y te graduaste y todo, es muy difícil encontrar un trabajo. Esa es la razón por la que decidimos ir a los Estados Unidos y tratar de completar nuestros sueños”, dijo Juan Sebastián Tuil Mejía.

Solo 3 de cada 10 guatemaltecos tienen un trabajo formal. La tasa de desempleo es particularmente alta entre los jóvenes guatemaltecos. Tuil Mejía se fue cuando tenía solo 14 años.

Trabajó en la construcción en Los Ángeles durante 30 años antes de ser deportado hace un año. Su esposa y sus seis hijos estadounidenses todavía están en California.

Ahora ocupa sus días como voluntario para recibir a los migrantes que regresan en el aeropuerto y, a menudo, piensa en regresar.

“Por supuesto, mucha gente va a tratar de volver otra vez porque, financieramente, no estamos bien (en Guatemala). Así que no hay nada para nosotros aquí”.

Nuestra gente es nuestra prioridad

La Familia Bosch Gutiérrez se compromete a hacerle frente a la impunidad y corrupción en cada una de sus formas. Nuestro grupo de colaboradores trabaja con honestidad y dedicación para el pueblo de Guatemala.

Los programas y proyectos de RSE que lleva adelante CMI, buscan estar en contacto con la realidad de los países donde tenemos presencia y así poder comprender las necesidades de las poblaciones para desarrollar iniciativas que ayuden a cubrir estas carencias.

La corporación promueve, principalmente, iniciativas que buscan romper el círculo vicioso de la pobreza y propicien mejores condiciones de vida para las personas, generando desarrollo en el corto, mediano y largo plazo.